En pacientes jóvenes, podemos obtener un ángulo mandibular más marcado, siguiendo la línea de los cánones de belleza actuales. En pacientes más mayores, puede ayudarnos a mejorar la flacidez al disimular el pequeño descolgamiento que se crea a los laterales de la cara. Muchas veces, al marcar el contorno mandibular (y el mentón si precisa), conseguimos disimular la papada.
Por lo tanto, con el tratamiento de marcación mandibular vamos a conseguir un aspecto más estilizado y rejuvenecido.